La hemorragia expulsiva coroidea es quizás la complicación más temida de la cirugía intraocular. Se presenta en la cirugía de catarata, glaucoma, de retina y en queratoplastias penetrantes, alcanzando en esta última su mayor frecuencia.
El hemangioma coroideo es un hamartoma congénito benigno relativamente infrecuente que puede presentarse de dos formas clínicas distintas: circunscrito o difuso.
El hemangioma de coroides es un tumor benigno, vascular, que puede ocurrir bajo forma localizada -circunscripta- o difusa. El tratamiento estará indicado en caso de que aparezcan complicaciones retinianas.